El viejo y el mar...

 

Ayer saqué esta foto. Este señor, que a mi amiga Laura le recuerda a "El viejo y el mar" de Hemingway, ha conseguido que vuelva a escribir en mi blog... 

Quizá sea pintor (justo enfrente de él, en un banco, había varios bocetos, lápices de colores y una mochila), quizá escritor por las letras que sujeta en su mano izquierda, quizá un soñador ganando la batalla a la melancolía... 

Pero lo que es seguro es que me hizo mirar hacia dentro después de ver demasiado hacia fuera... 

No me vio sacar esta foto, ni ninguna de las demás que le hice, seguramente ni siquiera sabía que, frente a él, paseaban cientos de personas... 

Ese calambre bajo la piel que notas cuando, sin querer, te has parado a pensar en qué pensará, te has parado a sentir en qué sentirá, hizo que llegara a la conclusión de que, la vida, pasa a pesar de ti. Que todo esto es un regalo y que, en realidad, solo hay un camino, seguir.

Seguir con las pinturas de colores para los días grises, con nuestros bocetos y escritos para no olvidar qué, quién y de dónde somos, con la mochila para llevar nuestros sueños y también nuestros logros, con el mar a la espalda para no perder la calma y con la mirada enfocada en aquello que nos importa y alienta...

Porque como dice la canción... "Se puede perder la vista pero nunca la mirada"



 

Comentarios

  1. ¿Sabes?, tus pensamientos compartidos me han despertado sentimientos muy agradables, tu manera de mirar desde afuera hacia dentro para acabar yendo al mundo, está segunda vez más grande que el primero, han conectado con mi manera de estar en el mundo... ¡Me encanta como escribes! ¡Me gusta tu manera de mirar! ¡No dejes de escribir!, para tener la posibilidad de seguir sintiendo, también t

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    1. ... también a partir de tus reflexiones.

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    2. ¡Que comentario más bonito! ¡Muchas gracias! 🤍

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